La madera de roble es quizás, junto a la de pino, la más popular. Lo es por su excelente relación entre calidad, apariencia, resistencia y facilidad para trabajar. Es una de las opciones favoritas tanto para carpinteros como para consumidores.
Desde un punto de vista estético es para muchos la madera de referencia. Es imposible encontrar dentro de un catálogo de cualquier fabricante de suelos o tableros varios tipos de roble: envejecidos, blancos, naturales, oscuros… Encontrándose estos diseños además entre los más vendidos.
Existen importantes variaciones en el precio de la madera de roble. Estas se deben al tipo, disponibilidad, abundancia, etc. No es una madera barata, pero gracias a su abundancia y teniendo en cuenta su calidad, tampoco es excesivamente cara. Otras maderas con características similares tienen un precio significativamente superior.
Lo podemos encontrar en el Norte de Europa, en la mitad este de Norteamérica, Canadá, Japón, Turquía, Norte de África o Asia Menor. En el caso de España, las mayores poblaciones las encontramos en el norte de la península (Galicia, Cornisa Cantábrica y Pirineo).
Se trata de un árbol de crecimiento relativamente lento, a menos que las condiciones sean especialmente propicias. Puede alcanzar hasta los 40 metros de altura y los 3 de diámetro. Crece hasta que cumple los 200 años, aunque puede vivir fácilmente hasta 600. Además de madera, del roble también se obtienen frutos, las bellotas.
- Roble Europeo (Quercus robur). Como su nombre indica es natural del continente europeo, desde el Norte de España hasta Noruega.
- Roble Blanco Americano (Quercus alba). Sus tonalidades van del marrón claro hacia el oliva, llegando la albura casi hasta el color blanco. Lo podemos encontrar en el este de los Estados Unidos.
- Roble Americano Rojo (Quercus rubra). De color marrón claro con ligeras líneas rojizas, la albura es también blanquecina. Similar al roble blanco, aunque ligeramente inferior a este. También algo más barato.
Otras clases de robles que podemos encontrar son: roble japonés, roble americano negro, turco…
Principales usos
Sin lugar a dudas estamos ante una de las maderas más versátiles que existe. Podríamos acabar antes diciendo cuales no son los usos de la madera de roble. Puestos a destacar algunos de estos usos:
- Barricas de vino o tonelería. En función del tipo de roble utilizado se obtienen unas características diferentes. Los grandes profesionales del vino son incluso capaces de determinar la subespecie utilizada. Entre estas destaca el roble francés.
- Mobiliario de calidad. Tanto de interior como de exterior.
- Suelos o parquets.
- Chapas decorativas y tableros.
- Carpintería: zócalos, molduras, puertas, ventanas, cercos…
- Torneados.
- Vigas de madera.
- Fabricación de barcos.
- Construcción.
Fuente: https://maderame.com/